La Paz, 28 oct (UC/MS).- La ministra de Salud, Eidy Roca, afirmó hoy que el Gobierno cumplió con Bolivia al haber hecho un manejo responsable de los recursos disponibles para enfrentar la emergencia sanitaria que causó la pandemia de COVID-19, que ahora -dijo- se encuentra controlada y en etapa de desescalada.
“Damos gracias a todo el personal de salud de todo el país, a la población que se puso la camiseta de la prevención y a todas las instituciones que estuvieron apoyando para que en este día lleguemos a decir: Bolivia hemos cumplido, estamos en un momento en el cual podemos respirar, pero no bajemos la guardia”, dijo.
En una conferencia de prensa, la ministra Roca recordó que el sistema sanitario boliviano carecía de los recursos básicos para enfrentar a la COVID-19 y que el Gobierno de la presidente Jeanine Añez encontró hospitales sin equipos, personal, medicamentos ni laboratorios.
“Todo el Gobierno se puso a disposición del Ministerio de Salud para contribuir en cada una de las medidas que se tuvieron que tomar”, enfatizó, al destacar las acciones gubernamentales para fortalecer a los establecimientos de salud con equipamiento, medicamentos, insumos y recursos humanos.
“Se tuvo que contratar más de 7.000 profesionales (…), porque no se contaba con el personal suficiente para la atención” de enfermos, destacó en el informe presentado.
La Ministra de Salud también destacó el trabajo conjunto con los gobiernos subnacionales, instituciones privadas y organismos internacionales que coadyuvaron en la adquisición de equipos e insumos para los hospitales, centros de recuperación, laboratorios y brigadas móviles de salud.
“Los indicadores nos están mostrando que hemos bajado a un índice prácticamente de una epidemia controlada, pero esto no implica que vamos a bajar los brazos. Es ahora, más que nunca, que nosotros debemos cuidar a los otros y cuidarnos nosotros mismos”, resaltó la autoridad.
La diseminación de la COVID-19 en territorio boliviano fue contenida con la cuarentena rígida que estableció el Gobierno entre marzo y mayo de este año, para luego dar paso a la etapa de ‘cuarentena dinámica y condicionada’ hasta el 31 de agosto.
En septiembre comenzó la transición hacia la fase de post confinamiento y de vigilancia comunitaria, con algunas flexibilizaciones a las restricciones para acompañar el reinicio de las actividades económicas y otras que fueron suspendidas por la pandemia.
“Evitemos las concentraciones masivas de gente, busquemos que nuestra población se empodere del conocimiento que es esta enfermedad, de los riesgos que ella tiene y de las complicaciones que ocasiona (…). Tenemos que tener el máximo cuidado para no vivir lo que se llama una reinfección”, recomendó la Ministra de Salud.
En casi ocho meses, Bolivia acumuló más de 140.000 casos positivos de COVID-19, de los cuales un 15%, aproximadamente, está activo, mientras que los pacientes recuperados se aproximan a 110.000.
“¿Qué medidas debemos tomar para prever un segundo brote? Creemos que lo más importante es fortalecer el primer nivel de atención en salud, mantener la Vigilancia Comunitaria Activa con visitas casa por casa, garantizar medicamentos (…) y contar con una mayor cantidad de recursos humanos”, remarcó.
